El próximo día 10, las voces blancas del Orfeón interpretarán la Tercera Sinfonía de Mahler en el Auditorio Nacional con la Royal Concertgebouw Orchestra y la dirección de Mariss Jansons. La parte coral se completará con la mezzosoprano Bernarda Fink y las voces infantiles de la Escolanía Sagrado Corazón de Rosales. El concierto se inscribe dentro del Ciclo de Ibermúsica.
La Tercera sinfonía, compuesta únicamente para voces blancas, se interpreta en vivo muy de vez en cuando, debido a su larga duración (entre 90 y 100 minutos, según versiones). Sin embargo, está considerada como una de las obras más bellas del compositor alemán. De su conmovedor movimiento final dijo una vez Leonard Bernstein que era “la música más dolorosamente hermosa escrita por Mahler”. Los textos que se cantan en el cuarto y quinto movimiento fueron escritos por Nietzche y del propio Mahler, y como es usual en él, la orquestación es extraordinaria, monumental.
Las orfeonistas la ha interpretado solamente en nueve ocasiones con los maestros Zubin Metha, Güell, Gómez Martínez y Vaclav Neumann. En Madrid se pondrán a las órdenes del director letón Mariss Jansons, titular de la Royal Concertgebouw Orchestra, que lleva colaborando con la Filarmónica de Berlín desde más de 30 años y está considerado como uno de los maestros más prestigiosos de su generación.
La Concertgebouw Orchestra nació en 1888. En su centenario se le otorgó el título de “Royal”. Willem Kes, Willem Mengelberg, Eduard van Beinum, Bernand Haitink, Riccardo Chailly y Mariss Jansons son los únicos seis directores que ha tenido esta formación compuesta por 120 músicos. Ha registrado más de mil grabaciones. Especialmente destacadas son sus interpretaciones del repertorio romántico tardío, así como las obras de Anton Bruckner.