El Doctor Koldo Ríos Álvaro y el Conservatorio Profesional de Música ‘Francisco Escudero’ de San Sebastián han sido galardonados con el XX Premio Orfeón Donostiarra-UPV/EHU y que fue creado con la doble finalidad de reconocer la trayectoria en el mundo musical y de incentivar la investigación musical.

 

El Conservatorio Profesional de Música ‘Francisco Escudero’ de San Sebastián recibe el galardón por su extensa trayectoria en el ámbito de la formación musical y, el premio a la investigación, recae en Koldo Ríos Álvaro por su trabajo ‘Iconografía musical en el País Vasco hasta 1600: Catalogación y estudio’.

 

La entrega de los galardones se realizará el jueves, 27 de mayo, a las 12.00 horas, en el Auditorio del Centro Carlos Santamaría de la UPV/EHU, en Donostia / San Sebastián, durante un acto académico en el que intervendrán el presidente del Orfeón Donostiarra, José María Echarri, y el vicerrector del Campus de Gipuzkoa de la UPV/EHU, Agustín Erkizia. Al término del evento, una representación del Orfeón Donostiarra ofrecerá una breve actuación con obras de su repertorio tradicional.

 

Debido a la situación sanitaria actual, este año el acto no estará abierto al público en general.

 

Conservatorio Profesional de Música ‘Francisco Escudero’ de San Sebastián

La creación de la Academia Municipal de Música de San Sebastián, como así se llamó lo que hoy es el Conservatorio Francisco Escudero, se debe al violinista donostiarra Fermín Barech (1840-1891). Fermín Barech, había estudiado composición bajo la dirección del eminente y erudito profesor François-Joseph Fétis (1784-1871) y violín con Hubert Léonard (1819-1890) en el Conservatorio de Bruselas. Se distinguió como Primer Violín en el Teatro Real de Bruselas, donde llegó a tocar bajo la dirección de Richard Wagner. De regreso a su ciudad natal, vivió en primera persona el ambiente y la enseñanza musical en su más elevado nivel, y quiso implantar en San Sebastián una academia musical pública. Su objetivo no era otro que el de formar profesionales de la propia ciudad para nutrir las agrupaciones musicales que la ciudad necesitaba.

En 1866, Fermín Barech ya propuso al Consistorio Municipal la creación de una Academia de Música. Fue el primer intento de muchos, pues volvió a plantear la cuestión en 1869 y en 1874. En 1877, se frustraron sus ilusiones al crear el Ayuntamiento solamente la Escuela de Solfeo, en la que el Ayuntamiento nombró como profesores de la misma al ya mencionado José Juan Santesteban (1809-1984) y a Raimundo Sarriegui (1838-1913), músicos de renombre y muy considerados en la ciudad. En 1878, volvió a exponer la cuestión ante el Ayuntamiento a la vez que ofreció una serie de conciertos en los que tuvo mucho éxito. Quizás fueron estos últimos hechos los que terminaron de convencer al Ayuntamiento para poner en marcha, por fin, la ansiada Academia Municipal de Música de San Sebastián en 1879.

Para la elaboración del Reglamento Orgánico se consultaron los de las Escuelas de Música de Pamplona (1858), Bayona (1876) y Bilbao (1878). En San Sebastián se optó por elaborar un reglamento análogo al de Bilbao con algunas modificaciones. Aparte de las obligaciones docentes, se acordó que los profesores deberían intervenir en determinadas funciones musicales de las parroquias de Santa María y San Vicente. Ya en el primer año de funcionamiento (1879) había 358 alumnos matriculados. En 1880 se anuncia también la matrícula para la enseñanza pública de silbo (txistu). En 1886 el Ayuntamiento decidió crear una Banda Municipal de Música con el objetivo de amenizar los veranos donostiarras. Los músicos de la Banda asumirían la enseñanza del solfeo y de los instrumentos de viento. Esto conllevó la práctica desaparición de la enseñanza de los instrumentos de cuerda. La sección de enseñanza se denominó Academia de la Banda de Música. La Academia de Música iniciada por Fermín Barech en 1879 se clausuró definitivamente en 1888.

A finales del siglo XIX, un grupo de personas instruidas e inquietas, aficionadas a la literatura, Música, Pintura, Arqueología, Investigación y todas las ramas de las ciencias y el saber, constituyeron la ‘Euskal-Batzarre’ (1893) y su sala de conciertos fue denominada Sala Wagner. Lo que en un principio eran veladas íntimas de música de cámara realizadas por ellos mismos, en poco tiempo se abrió a un público más numeroso creando el sistema de socios que pagaban una cuota. Es así como en 1895 se crea la Sociedad Anónima Easo, cuyo Palacio de Bellas Artes será gestionado por la Sociedad de Bellas Artes. La importancia que tiene la Sociedad de Bellas Artes para la Historia del Conservatorio es que fue en el propio Palacio de Bellas Artes donde se ubicó la Academia de Música y donde se impartieron las clases hasta el año 1912, cuando la Academia de Música se escinde de la Sociedad de Bellas Artes y se crea la nueva Academia Municipal de Música y Canto de San Sebastián.

En 1927 se reconoció oficialmente a la Academia como Conservatorio Elemental de Música, siendo entonces su director, Regino Áriz Cía. En 1933, la Academia se instala en la ubicación actual del Conservatorio de Música de San Sebastián Francisco Escudero, en la calle Easo de la capital guipuzcoana. El edificio es obra del arquitecto municipal Juan Rafael Alday En 1976 se le reconoce al Conservatorio la oficialidad del Grado Superior para los estudios de Piano. En 1980 se le reconoce la oficialidad del Grado Superior para todas las especialidades de Grado Superior, incluidas Composición, Dirección de Orquesta y Musicología. En 1985 se refunda la Orquesta Sinfónica del Conservatorio y se crea la Banda del Conservatorio, el Coro del Conservatorio y el Ballet del Conservatorio. En 1986 se crea la Joven Orquesta del Conservatorio. En el año1999 el centro pasa a depender del Departamento de Educación del Gobierno Vasco y, en el año 2004, se establece la denominación actual de Conservatorio Profesional de Música ‘Francisco Escudero’.

Koldo Ríos Álvaro

El Doctor Koldo Ríos Álvaro recibe a su vez el premio a la investigación musical por su tesis ‘Iconografía musical en el País Vasco hasta 1600: Catalogación y estudio’.

Koldo Ríos Alvaro (Barakaldo, 1962) es licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Salamanca y Doctor en Musicología por la Universidad de Valladolid y Universidad del País Vasco. Realizó estudios de piano en el Conservatorio Superior de Salamanca. Cuenta con más de 30 años de experiencia docente, todos ellos con el cargo de Jefe de Departamento de Música en centros educativos de secundaria, así como docente de Organología durante tres años en el Centro Superior de Música del País Vasco-Musikene. Así mismo, a lo largo de su trayectoria profesional ha publicado diferentes trabajos y ha recibido diversos premios.